El largo viaje hacia occidente: fauna ibérica hace 1.800.000 años
Durante el mes de julio del año 2001 se
inició la excavación e investigación de un nuevo yacimiento paleontológico
de grandes mamíferos en la granadina Cuenca de Guadix. Este yacimiento,
descubierto un año antes, contiene miles de huesos fósiles de animales
poco conocidos o totalmente desconocidos que habitaron en Europa cuando el
Terciario llegaba a su fin y se iniciaba el Cuaternario, el Sistema
geológico caracterizado por intensos cambios climáticos en los que se
enmarca la historia de la humanidad. Esto es, hablamos de hace un millón
ochocientos mil años.
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La historia evolutiva y ambiental de este
periodo de tiempo era prácticamente desconocida en Europa occidental, más
aún en la Península Ibérica, donde no se conocían registros con
información fidedigna sobre los ecosistemas en que habitaron un conjunto
de grandes mamíferos, muchos de ellos precursores de especies actuales,
que configuraron un mundo salvaje peculiar, peligroso, que poco tiene ya
que ver con la naturaleza de la Iberia actual.
Félidos con dientes en forma de sable,
cebras primitivas, antílopes de cuernos espiralados, rinocerontes y
guepardos gigantes coexistieron, como parte de un paisaje imposible hoy
día en nuestras latitudes, con jabalíes de río de origen africano, hienas
pardas, jirafas del grupo de los okapis y antepasados de lobos y chacales.
Más de 30 especies de mamíferos, algunas de ellas nuevas para la ciencia y
otras identificadas por primera vez fuera de África, se han caracterizado
de momento en la asociación de este rico y espectacular yacimiento. Esta
concentración de infinidad de huesos en una capa de limos se ha conservado
en el registro geológico gracias a la actividad recolectora y modificadora
de cadáveres realizada en el pasado por las hienas gigantes extinguidas,
que habitaron aquí, en el sureste de España.
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Esta exposición presenta, tras tan sólo
cuatro campañas mensuales de excavación paleontológica sistemática y tres
campañas mensuales de prospección de yacimientos (se han localizado ya 45
nuevas localidades fosilíferas), los resultados científicos y técnicos
obtenidos por el equipo de profesionales involucrados en la investigación
del más rico de estos yacimientos, Fonelas P-1. Este proyecto, liderado
desde el Instituto Geológico y Minero de España, tiene como fin completar
el vacío de información, tanto geológica como paleontológica y
paleoambiental, que existía para este intervalo cronológico en Europa
occidental.
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La muestra consta de 20 paneles
informativos sobre los distintos aspectos relacionados con la
investigación. Así, tras introducir al espectador en el marco faunístico
conocido previamente para el límite Plio-Pleistoceno en Eurasia y África,
se presentan las características propias de este yacimiento y de su
investigación, tales como: su reciente historia, la presentación de otros
yacimientos paleontológicos próximos geográfica y cronológicamente, la
estructura del proyecto científico y de su equipo, aspectos sobre la
excavación, la restauración de los fósiles, el diseño de una novedosa
aplicación informática para la gestión e investigación, la geología, la
tafonomía (o cómo se pudo formar el yacimiento), la bioestratigrafía (o
cómo podemos datar el registro geológico sobre la base de su contenido
paleontológico) y la presentación de las especies de grandes mamíferos más
significativas identificadas hasta el momento, destacando, finalmente, la
importancia de las mismas en el conocimiento de la paleobiología del
inicio del Cuaternario.
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Por otra parte, como material expositivo
se muestra diversos ejemplares fósiles de mamíferos extintos únicos en el
planeta, bien por su excepcional estado de conservación, bien por
representar especies nuevas para la ciencia, o bien por ser los únicos
testimonios directos conocidos de animales considerados hasta este
descubrimiento como exclusivos de otros continentes. La muestra fósil se
estructura en distintas vitrinas donde se presentan algunos de los fósiles
más excepcionales del yacimiento, bien por su estado de conservación o
bien por su interés científico, junto a una impresionante asociación de
huesos fósiles roídos por hienas en su sedimento original. Finalmente,
destacan distintas imágenes del paisaje desértico actual de la Cuenca de
Guadix, la zona de investigación del proyecto.
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El objetivo de esta exposición es
transmitir a la sociedad los avances obtenidos en una investigación
reciente, continua y novedosa, y mostrar un registro fósil que es
testimonio directo de una de las dispersiones protagonizadas por los
mamíferos terrestres (El largo viaje hacia occidente) más desconocidas y
espectaculares, un conjunto paleobiológico hasta ahora ignoto en la
historia evolutiva del planeta. |
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IGME
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